lunes, 20 de julio de 2009

CARTA DE CARLA ANGOLA A SU PADRE




Carla Angola
Comunicadora Social de la UCAB, con 11 años en Globovisión, actualmente conductora del programa “Buenas Noches”. Imagen de diferentes empresas y productos. “Pero cuando su apagan los micrófonos y las luces, soy simplemente una hija, que quería decirle a su padre cuanto lo admira y quiere”
Oda a mi padre y créanme que mi madre estará diciendo ahora no oda vale!!!
A quien mas le podría yo escribir esta carta si no al gran amor de mi vida.
El me dice buniyia pero la verdad es que me esperaba que yo fuera varón y no niña. Ojala alguien pudiera ayudarme a contarles sobre esta relación que, discúlpenme, seguramente me va a hacer llorar un montón. Y es que a pesar de tener muchas riñas es tan hermosa, profunda, madura, que sin dejar de ser padre e hija, es la de una mujer y del hombre que mas admira. Una vez me hicieron una entrevista, quizás trece años tendría, me dijeron: ¿cuéntanos Carlita, cuando crezcas, como quien serías? Y la verdad es que la respuesta ya la sabía. Yo no quería ser como todo bombero, enfermera, bailarina… ni siquiera periodista, simplemente quería imitar a aquel hombre que todas las noches me contaba su propia versión de caperucita y el lobo, que no era tan malo y, hasta chicles comía. Es verdad!! Se convertía en todo un showman a la hora de dormir pero si supieran que uno de sus inventos preferidos para hacernos reír, era uno llamado jugar frío. Que no era otra cosa que sentarnos en el piso al lado del balcón con la ventana abierta y un edredón tibio e imaginarnos que estábamos en el espacio perdidos. Pero ahora entiendo que quizás era un juego sencillo, pero un motivo para abrazarnos y estar apurruñado con mi hermanito y conmigo. La verdad es que cuando era pequeña mucho le temía porque era muy estricto y me dio unos cuantos tortazos que muy probablemente merecía. Pero al mismo tiempo yo estaba convencida de que a el también mucho le dolían. Una vez ya adulta me confeso que su mayor temor era que una crianza tan rígida en mi, generara lejanía. Pero en mi cabeza no era ese el recuerdo que prevalecía. Más peso y más valor tenían las memorias de una infancia llena de dicha, de cariño, alegría y , que se convertía, en una vivencia maravillosa porque Dios me dio el placer de haberlo tenido siempre en cada paso de compañía.
Mi madre estará pensando ahora: ¿y yo no pinto nada hija Mía?. Incluso, Alejandro mi novio casi moría, cuando se enteró que era mi padre y no él, a quien yo dedicaba en un concurso de amor estas líneas. Y no los quiero menos, es que el amor por mi padre es simplemente eso. Y no es que el pretenda competir con alguien por ese primer puesto en el corazón de su hija, de hecho muchas veces ni siquiera hace el esfuerzo porque en lugar de hablar, grita. Pero aquí lo importante no es si está de primero o tercero en esa lista. En esta oportunidad la oda es suya y como para mi el mundo no le ha dado como mínimo un Oscar, un Pulitzer, o un premio Nóbel de literatura. Pues yo le dedico estas páginas porque cuando se tiene al lado a un ser que es a la vez: padre, escritor, realizador, genio, sabelotodo y amigo incondicional, uno solo puede decir… hurraaa!
Si!! Yo logre ser amiga de mi padre y creo que la única razón es que lo amo como es… y sin duda mi paciencia es mucho más grande que la de él. Somos muy parecidos… viscerales, medio ciegos y estomacales, y según mi mi madre, no ahorramos mucho los reales, pero ambos tenemos una filosofía, y es que nos vamos a morir un día, y si hemos trabajado tanto, ahora es que tiene que gastarse. Es así, todo lo compartimos, para mi todo lo que tengo es suyo y es mío. Pero en riqueza me gana por muchas cabezas. Y si no está él yo no me decido. Creo que no hay tema que le haya consultado del que el no haya sabido. Se ha leído, no sé ni cuantos libros, toda su biblioteca como mínimo. Y yo trato de prepararme mucho, pero no le llego ni a los pies, a su conocimiento tan pulido y exquisito, no lo consigo. Sin embargo creo que su más grande fortuna es el ejemplo, ese que no necesita que te expliquen cómo debes hacerlo. Simplemente lo viste en casa. Los valores, la familia, la fe y, trataste de seguir esos pasos y ser una mujer de provecho. Mi padre es un artista. ¿No les parece increíble ver en un mismo hombre a alguien que pueda ser camarógrafo, productor, guionista y, además, tener tanto sentido de la escena y el humor, que te haga morir de la risa?¿Ya había dicho que era erudito, consejero, profesor y novelista? Si el no estuviera en el mundo quizás yo no trataría de ser tan perfeccionista. Siempre que estas en esta profesión te preguntan si te inspiró algún periodista. ¡Y claro que estamos en Venezuela inundados de talento, profesionales y ensayistas! Pero quieren saber lo que siento, yo después de cada jornada de trabajo, lo único que quiero conocer es si mi familia y elestán satisfechos y contentos.
Últimamente estoy más susceptible cuando hablo de mi padre y el siempre piensa, pero bueno ya me están enterrando vale? No es eso es que ahora que son grandes, la caperucita y el padre se enfrentan a más lobos que antes. Quizás el nunca me acompañó a las clases de Karate, pero no quisiera dar ni un solo paso el resto de mi vida sin antes consultarle. Ahora que ya crecí, entendí que ese cuento que con el aprendí siempre tenia un final feliz, porque estuvo allí para acabar con mi amenaza en un tris. Pero claro era muy fácil que esa historia terminara ahí. Sin ningún esfuerzo de mi parte por venir. ¡Que tesoro que ahora esa lucha la podemos compartir! Y, aunque él a veces no es precisamente sutil a la hora de expresar lo que tiene que decir, que curioso me tiene aquí, ya descubrí cual era en este libreto un buen papel para mí.
Así es mi padre y se llama Carlos Angola. Un excelente director, si por que no, peleón, pero en todo caso eso también lo heredé yo. Sin embargo el siempre será mejor persona. Me acuerdo que una vez se le ocurrió ponernos de sobrenombre a mis hermanos y a mi: azucena, petunia y margarito y, aunque a mi hermano el que le tocó, no le gustó ni un poquito, se convirtió en un momento lindo y en un evento propicio para echar broma. A mi mamá siempre le ha dicho pillín, a mi hermana moni y Carlitos que es el chiquitín siempre será panchito, aunque yo creo que a mi me tocó el mas raro, pero el mas bonito, mi abuelo se molestaba y es que a mi papi le dio por decirme lobito. Como ven hay en estas anécdotas muchos animales feroces, pero este que me tocó representar a mí, lo único que quería decir, es que lo ama con locura y frenesí a vivas voces. Ojala mis hijos me lleguen a querer por lo menos la mitad de lo que yo lo quiero a él. Que lástima que el mundo no lo ha reconocido, no lo ha descubierto como unos de sus grandes hallazgos, porque él es uno de esos seres cuya vida, brillantez y trabajo, merecen estar en las páginas de un millón de libros y de los más importantes diarios. Si, definitivamente es mi individuo favorito en el mundo, yo soy su fan e hincha número uno. Yo se que una persona como mi padre, una sola, pero ustedes también tuvieron o tienen uno y si no les han dicho cuento los aprecian de sobra, se perderán la mejor experiencia de la adultez y después ya será muy tarde, porque la vida es ya, es ahora. Siempre recordamos una tontísima película en cuyo final ese antihéroe aparece en una escena muy ridícula… le dice a su amada: ¡Volveré!... y ella le contesta:…¿para que? Pero nuestro cuento que no es el de los three amigous, sino de Carlos y su lobito, yo sé que el siempre sesea que yo vuelva y yo que él entienda que estoy inmensamente orgullosa y agradecida de que a el le haya tocado ser mi papito. Y como ser humano evidentemente, he tenido mis tropiezos, mis conflictos y mis penas, pero papi me siento tan plena. Con tu sabiduría y la fórmula de mamá de andar repartiendo sonrisas por la vida, ni me hace coquito la desdicha. Tú haces que mi vida sea tan maravillosa, y a veces no te llamo, pero es ocupación, jamás pienses que es otra cosa. Quizás no te has ganado tantos premios como mereces, pero tienes una hija feliz, y es un inmenso mérito, ¿no te parece?
Carla Angola R.

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